Pensad por mente, propia y dejad que los demás disfruten del derecho a
hacer lo mismo. ( Voltaire )
sábado, 31 de octubre de 2015
Armonía (Acrilicos 80x33)
Para poner armonía en nuestras relaciones con los demás, primero debemos alcanzar la armonía dentro de nosotros mismos. ( Anónimo )
Esperanza (Acrilicos con rodillo y espatula 40x30)
La esperanza es como el sol, el cual, mientras viajamos hacía él, proyecta detrás de nosotros la sombra de nuestra carga. (Samuel Smiles )
Libertad (Acrilicos en relieve 80x33)
Silencio (Acrilico con relieves 40x30)
jueves, 22 de octubre de 2015
El Momento Ideal (Acrilico 40x30)
No esperes que llegue el MOMENTO IDEAL,
ni la mejor ocasión para actuar,
porque tal vez no llegue nunca.
ni la mejor ocasión para actuar,
porque tal vez no llegue nunca.
Sueños (Lapiz 20x30)
No hay nada IMPOSIBLE,
porque los SUEÑOS de ayer
son las ESPERANZAS de hoy
y pueden convertirse en REALIDAD mañana.
porque los SUEÑOS de ayer
son las ESPERANZAS de hoy
y pueden convertirse en REALIDAD mañana.
miércoles, 7 de octubre de 2015
Bisonte (Óleo sobre Lienzo 34x23)
La cueva de Altamira alberga una de las manifestaciones artísticas más extraordinarias del arte paleolítico. Se encuentra en lo alto de una colina en el municipio de Santillana del Mar (Cantabria) desde donde se puede contemplar el paisaje montañoso de la Cordillera Cantábrica y las suaves colinas del litoral.
Se trata de una cueva de dimensiones reducidas pero que en época Paleolítica contaba con una amplia zona vestibular donde se desarrollaba la vida cotidiana de los grupos de cazadores recolectores. Un desprendimiento clausuró este espacio hace 13.000 años e imposibilitó el acceso a la cueva hasta su descubrimiento para la sociedad contemporánea en el siglo XIX. Los desprendimientos fueron habituales durante la Prehistoria y hasta los años treinta del siglo XX debido a las características geológicas de la cueva; desde entonces se han llevado a cabo acciones para la conservación de la cueva y el patrimonio que alberga.
lunes, 5 de octubre de 2015
Azotea (Óleo sobre lienzo 20x60)
Poblado estoy de muchas azoteas. Sobre la mar se tienden las más blancas, dispuestas a zarpar al sol, llevando como velas las sábanas tendidas. Otras dan a los campos, pero hay una que solo da al amor, cara a los montes. Y es la que siempre vuelve. Allí el amor peinaba sus geranios, conducía las rosas y jazmines por las barandas y en la ardiente noche se deshacía en una fresca lluvia. Lejos, las cumbres, soportando el peso de las grandes estrellas, lo velaban. ¿Cuándo el amor vivió más venturoso ni cuándo entre las flores recién regadas fuera con más alma en la sangre poseído? Subía el silbo de los trenes. Tiemblos de farolillos de verbena y músicas de los quioscos y encendidos árboles remontaban y súbitos diluvios de cometas veloces que vertían en sus ojos fugaces resplandores. Fue la más bella edad del corazón. Retorna hoy tan distante en que la estoy soñando sobre este viejo tronco, en un camino que no me lleva ya a ninguna parte. Rafael Alberti |
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